Hace una semana el oleoducto de Colonial Pipeline en Pelham, Alabama, fue víctima de un ciberataque que dejó inoperativo sus sistemas, lo que a su vez detuvo la producción de combustible, ocasionando que se declarara un estado de emergencia.
La noticia fue confirmada por la Oficina Federal de Investigación de EE. UU. Además de señalar a la banda de ransomware Darkside como responsables del ataque.
Al inicio, los medios indicaron que Colonial se negaba a pagar el rescate, sin embargo, existen sospechas de la veracidad de esto, ya que la rápida restauración de las actividades aparenta que se ha pagado el rescate.
En un reportaje del New York Times, se hace alusión a que la cifra del rescate fue de $5 millones en criptomonedas, que es igual al monto de 75 Bitcoins, para obtener la clave de descifrado y restaurar los archivos afectados.
Según los medios, después de obtener la clave de descifrado, la empresa la utilizó junto con su sistema de respaldo para restaurar rápidamente los sistemas afectados y reanudar las operaciones de la canalización.
Fuente:
Redacción propia.