Apple informó que está dejando inactivos los iPhones robados de sus tiendas. Los saqueos se produjeron en medio de las protestas a causa de la muerte de George Floyd. La compañía dijo que los teléfonos están siendo rastreados y las autoridades serán alertadas.
Además, la compañía realizo una estrategia poco inusual. Habilitaron los equipos, permitiendo que los ladrones usaran los aparatos unos días después de los saqueos, más tarde Apple envió a la policía todos los datos y ubicaciones almacenadas en los teléfonos, finalmente bloquearon los dispositivos.
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Redacción propia